A lo largo del año fiscal de julio de 2019 a junio de 2020, la ciudad de Logan, a las afueras de Brisbane, en la costa este de Australia, encontró y reparó un total de 154 fugas, roturas y reventones en la red de agua de 2293 km, como resultado de 145 encuestas de detección de fugas con los registradores ZONESCAN 820 Lift & Shift. En mayo de 2021, tras su éxito con el ZONESCAN 820, la ciudad de Logan decidió implementar un sistema de registradores ZONESCAN NB-IoT de 300 puntos.
El nuevo sistema fue un éxito inmediato. Al cabo de unos meses, Logan Water detectó 13 fugas en el servicio/la red principal y 10 fugas en el lado del cliente, lo que supuso unos 490 metros cúbicos de pérdidas reales de agua no facturada (NRW). En total, la detención de estas fugas evitó un gasto estimado de 261.000 dólares en agua no facturada en un periodo de 12 meses. Un nuevo estudio de caso detalla dos fugas no superficiales identificadas por el sistema NB-IoT de Logan en julio de 2021. Se calcula que solo estas dos fugas provocaron pérdidas de 182.000 dólares en NRW al año.